Importancia de las Colecciones Biológicas

La necesidad de tener colecciones de historia natural es hoy más importante que nunca dado que continúan perdiéndose ecosistemas completos, debido a concepciones no sustentables de las actividades humanas. La biodiversidad es expoliada por destrucción y fragmentación de hábitat, explotación descontrolada de recursos, comercio ilegal de especies, invasiones biológicas y extinciones. Las acciones de conservación de la biodiversidad deben estar acompañadas por esfuerzos destinados a su identificación, registro, inventario y monitoreo. El conocimiento de la biodiversidad estructural requiere como primer paso su descripción, inventario y monitoreo. La colecta científica es el primer paso para realizar un inventario de la biodiversidad. En esta etapa la creación y manutención de colecciones científicas es de capital importancia (Rau, 2005; Ossa et al., 2012).

Estudios sugieren la viabilidad, de utilizar muestras de material biológico procedente de especímenes de museo o colecciones biológicas, como una alternativa para los análisis de biodiversidad, basados en pruebas moleculares y de diversidad genética, sin tener que realizar, esfuerzos de muestreo que implique mayor costo, riesgo y esfuerzo de colecta, ni tampoco, el sacrificio de animales silvestres, especialmente, especies en peligro de extinción o bajo alguna categoría de amenaza (Ossa et al., 2012).

Las colecciones de historia natural proveen material de investigación esencial a las ciencias biológicas, sirven como una vasta biblioteca sobre los organismos que han vivido y viven en la Tierra, y contribuyen a la educación pública en un formato muy asequible (Páez, 2004; Mesa, 2006).

Las colecciones y sus bases de datos, constituyen herramientas básicas para la investigación de fenómenos fundamentales de las ciencias biológicas, tales como la evolución, la ecología, la biogeografía, el comportamiento y su aplicación en cambo climático y agricultura, evaluaciones regionales de impacto ambiental, planificación de uso y conservación de ecosistemas y biodiversidad, entre otros (Thomson, 2005).

Las técnicas informáticas de inventariado han tenido gran crecimiento en las últimas décadas. Bases de datos son manejadas en lenguajes de programación (formato de menú facilitador, criterios de búsqueda flexibles, generación de informes cruzados, formatos y archivos compatibles) destinados al mantenimiento, edición y actualización de datos, facilitando la recuperación, homologación y normalización de información, la generación de reportes y la calidad de los mismos, disminuyendo la posibilidad de error.

Sin embargo, los museos y sus colecciones enfrentan un cambiante e incierto futuro. El funcionamiento eficiente de las colecciones requiere, además de un presupuesto permanente, de personal especializado y sólido conocimiento para atender sus múltiples objetivos y funciones, así como los variados problemas administrativos, técnicos que conllevan el manejo, preservación, inventario, catalogación, exhibición, recuperación, almacenamiento, difusión e intercambio.

En conclusión, las colecciones tienen una inmensa importancia porque son la fuente principal de la información que se genera y difunde en diferentes formatos, como artículos científicos, libros y guías de campo, manuales, páginas de especies y otras publicaciones. Las colecciones permiten documentar la enorme diversidad biológica de un país, la distribución de las especies en las diferentes regiones y ecosistemas, por bandas de elevación y alrededor del año.

REFERENCIAS

Mesa, D. 2006. Protocolos para la preservación y manejo de colecciones biológicas. Boletín Científico - Centro de Museos - Museo de Historia Natural 10:117-148

Ossa P., Giraldo, J. M, López, G., Dias, L., Fredy A. Rivera P. 2012. Colecciones biológicas: una alternativa para los estudios de diversidad genética. Boletín Científico - Centro de Museos - Museo de Historia Natural 16:143 - 155

Páez, V. 2004. El valor de las colecciones biológicas. Actualidades Biológicas 26: 2 pp.

Rau, J. R., 2005. Biodiversidad y colecciones científicas. Revista Chilena de Historia Natural 78: 341-342.

Thomson, K. 2005. Las Colecciones de los Museos de Historia Natural en el Siglo XXI. ActionBioscience.org. www.actionbioscience.org/esp/evolucion/thomson.html